Juan. Minero. Colección «Sombras».
Acrílico sobre tabla texturizada 30×40 cm.
(Foto original de Pierre Gonnord)

Juan tiene una mirada dura y desafiante, propia de quien sabe lo que es el dolor y el sufrimiento, de quien lo ha experimentado en carne propia y de quien ha hecho daño. Es una mirada cruda y descarnada. Una mirada directa y sin concesiones, que se enfrenta a la tuya a modo de espejo y te desafía. Es una mirada incómoda, que no te deja indiferente, que te obliga a reconocer que tú también has experimentado ese mismo dolor y el sufrimiento, que tú también lo has infligido a los demás. Es una mirada que desnuda tu alma y que se inmiscuye en tus secretos. Es una mirada que te anuncia que conoce tu interior.

Y por eso asusta.

Y por eso molesta.